Samuel Eto’o no está pasando por un momento fácil. Hace un mes fue condenado por fraude fiscal y ahora, los problemas vienen con Erika, su hija no reconocida. Se conoció con su madre en 1998 y si bien su relación duró solo meses, fruto de ese vínculo nació ella. Él se negó a reconocerla, pero ahora ella es quien pelea frente a la Justicia por sus derechos de filiación.
En 2018 se inició un proceso por el reconocimiento, pero, como él se niega a eso, los tribunales le impusieron que debe pagarle una mensualidad de 1400 euros de forma retroactiva. Sin embargo, el futbolista continúan negándose a cumplir con dichas obligaciones. Por lo cual, ahora está en medio de una situación aún más grave que lo complica.
El abogado que representa a Erika brindó detalles a «El Español» respecto a la situación legal de la supuesta hija. «El Juzgado de Primera Instancia de Madrid acordó hace unos años establecer una pensión en concepto de alimentos de 1.400 euros en favor de Erika, condenando al pago de esta cifra al futbolista. Samuel Eto’o no ha cumplido con su deber de alimentos», precisó Fernando Osuna.
«Queda desamparada, en una situación económica extrema, puesto que no cuenta con la capacidad económica suficiente para subsistir y que se ha visto incluso más menoscabada por no estar recibiendo la pensión por alimentos que le corresponde», agregó el letrado respecto al caso.
«Eto’o ha tenido y sigue teniendo una actitud de desprecio hacia su hija. El demandado ha hecho oídos sordos a las obligaciones paterno-filiales que el juzgado le impuso. Es una persona de notoria relevancia pública. Cuenta con propiedades en diferentes países, además de ser propietario de coches de lujo», informó el abogado.
«Y otras posesiones de gran valor adquisitivo que no hacen más que poner de manifiesto que cuenta con la capacidad económica suficiente. Diversos juzgados españoles e italianos han intentado notificar al futbolista acciones judiciales en su contra en domicilios que oficialmente tiene en España. Las demandas de paternidad han sido noticias en Francia, Italia, Inglaterra, Camerún y otros muchos», cerró.